En el libro "Agora U", el historiador de Cluj Gheorghe I. Bodea escribe que, durante el periodo de Bejenia, 38 jugadores... jugaron para la Universidad (entre paréntesis se indica el número de partidos, respectivamente el número de goles conocidos marcados): Medrea II (52, 0), Tiereanu (51, 28), Medrea III (49, 5), Coracu (47, 21), Dascalu (45, 48), Dumitras (41, 4), Joja (37, 2), Boros (34, 0), Coman (33, 8), Jifkovici (28, 7), Musca (27, 0), Costea (25, 0), Chirilă (21, 0), Bretoteanu (21, 0), Medrea I (21, 0), Luca (18, 0), Hintz (15, 1), Moldovan (14, 2), Maghear (14, 0), Adoc (13, 0), Ioanovici (12, 0), Paunescu (11, 0), Tereanu (9, 0), Chendi (9, 0), Sângeorzan (8, 0), Vigu I (6, 0), Radulescu-Jumate (4, 0), Cornea (3, 0), Crisan (2, 0), Kundt (2, 0), Pestean (2, 0), Szoboszlay (2, 0), Hulea (2, 0), Iancovici (2, 0), Ivan (2, 2), Mesaros (1, 0), Potopeanu (1, 0), Tiberian (1, 0). En total, en Sibiu "U" jugó 84 partidos, de los que ganó 49, empató 6 veces y perdió 29. Marcó 263 goles y encajó 167.
La mejor actuación de los jóvenes de Cluj durante ese periodo fue el acceso a la final de la Copa de Rumanía, en la temporada 1941-1942. Por desgracia, la "U" fue derrotada en Bucarest por el Rapid, por 7-1. El momento de su regreso a Cluj, el 26 de julio de 1945, se describe en un emotivo párrafo del libro de Mircea Luca: "Tenía miedo de pisar las piedras, no fuera a ser que algo se moviera y cambiara. El mismo día de nuestra llegada fuimos al estadio. Szony-baci estaba allí, como siempre. Cuando nos vio, no pudo decir ni una palabra. Se quedó así, unos tres minutos seguidos. Ni siquiera parpadeó. Luego, igual de mudo, se acercó a un armario. Abrió con la llave y tiró de un cajón grande, como de rejilla. Y, con los mismos movimientos robóticos, sacó del cajón once camisetas blancas y negras, cuidadosamente apiladas unas sobre otras. Las puso sobre la mesa y las alisó varias veces. Nadie dijo nada. Me miré los ojos para no llorar y busqué en el montón el número de la camiseta. 5. Era mi camiseta. Mientras tiraba de él por la cabeza, me entretuve buscando su boca para poder besarle por dentro".
(fuente: semanario Clujeanul)